Pumpkin Pie

 

Aunque este tipo de tarta no es muy  popular aquí, esta semana vamos a hacer una receta americana muy propia del otoño, que es tiempo de calabazas. 

 

Es una receta un poco laboriosa, pero servir este tipo de pastel es una tradición típica en Estados Unidos en Thanksgiving Day, una fiesta que simboliza la familia y el hogar, y que se celebra el cuarto jueves de noviembre. Todo empezó cuando los europeos que se instalaron en el nuevo mundo conocieron la calabaza. Tan pronto como se percataron de la versatilidad de este producto, empezaron a utilizarla en platos tanto dulces como salados. La receta del Pumpkin Pie ha ido evolucionando a través de los siglos hasta convertirse en una base crujiente de masa brisa recubierta de una especie de natilla hecha con puré de calabaza, huevos, leche y una mezcla de especias, que normalmente se sirve con una cucharada de nata montada.

La verdad es que la base de Masa Brisa puede comprarse en la sección de refrigerados de casi cualquier supermercado, pero yo os propongo que la hagáis en casa por varios motivos: es una masa bastante fácil de elaborar, no se tarda nada y además es más divertido hacerlo en casa. Receta de la Masa Brisa.

Pumpkin Pie

Ingredientes

Masa Brisa

3 huevos

2 tazas puré fresco de calabaza (425 g)

1/2 taza nata para montar (120 ml)

1/2 taza azúcar moreno (110 g)

1 cucharadita canela molida

1/2 cucharadita jengibre molido

1/8 cucharadita clavo molido

1/2 cucharadita sal

Elaboración de la Pumpkin Pie

 

Primero que nada dejamos preparado el molde con la masa y precalentamos el horno a 190ºC poniendo la rejilla en el tercio inferior del horno.

Si la masa está hecha en casa, sobre una superficie de trabajo enharinada y con la ayuda de un rodillo, la extendemos hasta formar un círculo que quepa en un recipiente de unos 20-23 cm de diámetro. Para evitar que la masa se pegue a la superficie de trabajo, la vamos levantando y girando mientras estiramos con el rodillo, siempre desde el centro hacia fuera para conseguir un espesor uniforme. Para asegurarnos de que el tamaño es el adecuado  para nuestro recipiente, ponemos este encima, la masa debería ser entre 2-3 cm más grande.

Una vez tenemos la medida deseada, o si la masa es comprada, sobre el rodillo enrollamos con cuidado la masa, eliminando el exceso de harina, y lo desenrollamos encima del molde. Acoplamos la masa presionando poco a poco. La masa ya está lista para ser usada. Cubrimos la masa en el molde con film y refrigeramos durante media hora antes de incorporar el relleno.

Para el relleno, primero que nada vamos a preparar el puré de calabaza. Para ello cogeremos una calabaza de tamaño no muy grande (2.5 - 3.5 kg) y la cortamos por la mitad, le quitamos las fibras y semillas, y lo asamos al horno a 180ºC unos 45 - 60 minutos, o hasta que esté totalmente cocida. Una vez asada, se tritura el puré de la calabaza hasta que quede cremosa y sin grumos ni trozos.

En un bol grande, batimos los huevos. Añadimos el resto de los ingredientes y batimos o removemos hasta que quede todo bien integrado. Incorporamos la mezcla dentro del molde con la masa y colocamos el recipiente sobre una placa de horno para evitar derrames y salpicaduras en el horno. Hornear durante 45 - 55  minutos, o hasta que el relleno esté cocido y la masa dorada. Podemos saber cuando está el relleno insertando un palillo, este debería salir casi limpio. Retiramos del horno y dejamos enfriar sobre una rejilla.

 

 

Espero que disfrutéis preparándola y que os guste el resultado. Nuestro postre ya está listo. La mejor forma de servirlo a temperatura ambiente y acompañado de un poco de nata montada.

Esta receta pertenece a http://www.joyofbaking.com/pumpkinpie.html

Masa Brisa

La Masa Brisa tiene un rico sabor a mantequilla y una textura granulosa y crujiente. Su uso es ideal tanto para recetas dulces como saladas, en quiches y tartaletas. Una vez hecha y envuelta en plástico, la masa puede aguantar en el frigorífico varios días, e incluso puedes almacenarla en el congelador durante un mes. Para la descongelación es mejor dejarla en el frigorífico unas horas antes de usarla.

 

Esta masa solo contiene cinco ingredientes (harina, mantequilla, azúcar, sal y agua) y aunque se puede hacer a mano, siempre es mejor utilizar un robot de cocina para conseguir que se integren bien los ingredientes, y además es más rápido.

 

Las cantidades empleadas en esta receta dan como resultado una masa suficiente para dos bases de tarta de unos 23 cm de diámetro. Puedes dividirla en dos y almacenar una de las porciones para otra ocasión.

 

Masa Brisa

 

Ingredientes

 

2+1/2 taza harina (350 g)

1 taza mantequilla sin sal, muy fría (226 g)

1 cucharada azúcar blanco granulado (14 g)

1 cucharadita sal (4 g)

1/4 - 1/2 taza agua con hielo (60-120 ml)

 

 

 

 

Elaboración de la Masa Brisa

 

En el recipiente del robot ponemos la harina, la sal y el azúcar, y mezclamos bien. Añadimos la mantequilla cortada en trocitos y pulsamos durante unos segundos el botón del robot de manera intermitente hasta que visualmente parezcan granos de harina. No hay que preocuparse si se observan trozos grandes de mantequilla en la harina. Pueden suceder dos cosas. Si mezclamos demasiado la mantequilla con la harina, esta mezcla no podrá absorber bien el agua lo que provocará que la masa sea frágil y se rompa fácilmente. Por el contrario, si no mezclamos lo suficiente la mantequilla con la harina, necesitaremos más agua de la necesaria para unir los ingredientes y la masa será más dura por haberse formado demasiado gluten.

 

 

A continuación se necesitan entre 60 y 120 ml de agua muy fría para unir los ingredientes, así que la añadiremos gradualmente. Primero 1/4 taza y lo mezclamos con el robot. La masa está lista cuando queda en grumos y al coger uno de los grumos y apretarlo entre los dedos se mantiene unida, si no es así añadimos una o dos cucharadas de agua y volvemos a mezclar hasta obtener la textura que buscamos.

 

 

Volcamos la masa en una superficie de trabajo, previamente enharinada, y la trabajamos hasta formar una bola. Dividimos la bola en dos y aplanamos cada mitad con la mano o con el rodillo hasta formar dos círculos de unos 12-15 cm de diámetro. Envolvemos cada uno en papel film y refrigeramos hasta que la masa esté firme, como mínimo una hora, o también podemos congelar el que no vayamos a utilizar. El refrigerado permite que el gluten en la harina repose y se endurezca para que la masa sea fácil de manejar, que no se pegue y como resultado obtengamos una base granulosa y crujiente.

 

 

Cogemos uno de los discos de masa y sobre una superficie de trabajo enharinada y con la ayuda de un rodillo, extendemos la masa hasta formar un círculo que quepa en un recipiente de unos 20-23 cm de diámetro. Para evitar que la masa se pegue a la superficie de trabajo, vamos levantando y girando mientras la estiramos con el rodillo, siempre desde el centro hacia fuera para conseguir un espesor uniforme. Para asegurarnos de que el tamaño es el adecuado para nuestro recipiente, ponemos este encima, la masa debería sobresalir de 2  a 3 cm.

 

Una vez tenemos la medida deseada, sobre el rodillo enrollamos con cuidado la masa, eliminando el exceso de harina, y lo desenrollamos encima del molde. Acoplamos la masa presionando poco a poco, y si nuestro molde tiene el borde liso, podemos hacer la forma ondulada con los dedos, como se ve en la foto. La masa ya está lista para ser usada. La cubrimos con film y refrigeramos durante media hora antes de incorporar el relleno.

 

 

 

 



Chocolate Chip Cookies

Chocolate Chip Cookie es la galleta más famosa de América. Fue creada en 1930 por la propietaria de Toll House Inn, en Massachusetts. La historia cuenta que, un día, decidió añadir trocitos de una barra de Nestlé de chocolate semidulce a  su masa de galletas. Inmediatamente, las galletas  se hicieron muy populares entre sus clientes y esta popularidad llegó hasta la compañía Nestlé, que compró los derechos del nombre del hostal, Toll House, y la receta de la masa de las galletas, y la publicó en la parte trasera de su paquete de chips de chocolate.

Esta receta se parece mucho a la de Nestlé y en casa nos gusta mucho. Es muy fácil de preparar y además salen unas cinco docenas de galletas, que son muchas, aunque están tan ricas que duran muy poco!!!


Chocolate Chip Cookies

Ingredientes

1 taza mantequilla sin sal, a temperatura ambiente (226 g)
3/4 taza azúcar blanco granulado (150 g)
3/4 taza azúcar moreno (160 g)
2 huevos (tamaño L)
1+1/2 cucharadita extracto de vainilla
2+1/4 taza harina (295 g)
1 cucharadita fécula de maíz (maicena)
1 cucharadita bicarbonato
1/2 cucharadita sal
1 paquete chips de chocolate (250 g)

1 taza nueces troceadas (100 g), opcional

Elaboración de las Chocolate Chip Cookies
 

Lo primero que hacemos es precalentar el horno a 190ºC, con la rejilla justo en el centro, mientras preparamos la masa.

En un bol, batimos la mantequilla hasta obtener una mezcla suave y cremosa. Añadimos el azúcar, blanco y moreno, y batimos durante 2 minutos aproximadamente. Cuando quede una crema homogénea, añadimos los huevos de uno en uno. Batimos bien, asegurándonos de que queda bien integrado uno antes de añadir el otro. Añadimos la vainilla y batimos.

En otro bol aparte, mezclamos y removemos la harina, bicarbonato, sal y fécula de maíz. Añadimos los ingredientes secos poco a poco a la mezcla de huevo, batiendo hasta que quede todo bien incorporado. Por último, añadimos los chips de chocolate y los trocitos de nuez (opcional).

La masa suele quedar muy cremosa, sobretodo si la temperatura de la cocina es elevada, así que yo la tapo con film de cocina y la meto en la nevera entre 15 y 30 minutos, hasta que adquiera una consistencia más firme.

Con una cuchara vamos colocando montoncitos en una placa y sobre papel para horno, dejando suficiente separación entre ellos, ya que con el calor se expanden bastante. Horneamos durante 10-15 minutos, o hasta que los bordes estén dorados. Al sacar las galletas del horno, todavía están blandas, así que esperamos un poco antes de retirarlas de la placa. Después las dejamos sobre una rejilla hasta que se enfríen completamente.

Una vez frías, se deben de proteger de la humedad para que no se reblandezcan, así que conviene guardarlas en un recipiente cerrado.

Ya tenemos galletas para desayunar o merendar durante unos días, y están riquísimas!!!

Tarta de Manzana de hojaldre y crema

Hoy me estreno en este blog, y  como estamos en otoño y es época de manzanas he pensado que, aunque es una receta muy común, podríamos empezar con la típica Tarta de Manzana de hojaldre y crema.

 

Es muy sencilla de preparar y resulta muy ligera, así que podéis prepararla en un momento, los ingredientes son sencillos y el resultado es delicioso. Otra ventaja de esta tarta es que no necesita reposo y está perfecta templada.

Normalmente cuando me meto en la cocina me gusta hacerlo con recetas un poco más elaboradas, pero he pensado que esta es una tarta que no debe faltar en un recetario.

 

La base de la tarta es de masa de hojaldre, que podemos encontrar en cualquier supermercado, fresca o congelada. Más fácil no puede ser... Y el relleno es de crema pastelera y manzanas, obviamente.

 

 

Tarta de Manzana de hojaldre y crema

 

Ingredientes

 

1 placa de hojaldre

4 manzanas

1/2 litro de leche

3 yemas de huevo

40 g harina de maíz

120 g azúcar

1 vaina de vainilla

piel de limón

azúcar glas para decorar

 

 

 

 

Elaboración de la Tarta de Manzana de hojaldre y crema

 

 

Lo primero que hacemos es precalentar el horno a 200ºC mientras preparamos la crema. Para ello, ponemos al fuego 350 ml de leche con la vaina de vainilla (abierta por la mitad), la cáscara de limón y el azúcar. En otro recipiente, mezclamos la leche que queda con la harina de maíz y las yemas de huevo. Cuando la leche que está en el fuego empiece a hervir, bajamos el fuego y añadimos la mezcla reservada poco a poco y vamos moviendo con unas varillas hasta que espese. Debe quedar una mezcla suave y sin grumos, cuando esté lista, apartamos del fuego y dejamos que temple.

 

Extendemos la masa de hojaldre en porciones con la forma que queráis, yo las he hecho en tamaño individual y redondas. Doblamos los bordes de la masa y extendemos la crema por dentro. Luego colocamos encima las manzanas, en cortadas de no mucho espesor. Y finalmente, las metemos en el horno a 200ºC durante aproximadamente 15 minutos, o hasta que los bordes de la manzana se doren.

Por último, espolvoreamos un poco de azúcar glas por encima y listas para disfrutar!!!